jueves, 22 de mayo de 2008

“Que no queden rastros”: La censura institucional de la PUCV pasea su pincel por Sausalito

(fuente una prensa diferente)

Gran sorpresa e impacto se llevaron nuestros compañeros de Sausalito el día Martes 20 de Mayo cuando, tras entregadas la gran parte de edificios mantenidos en toma, presenciaron uno de los actos de censura mas inesperados por las autoridades de nuestra universidad.

Bien es sabido por muchos, como la Facultad de Filosofía y Educación funcionó como una fuerte plataforma de trabajo para diferentes carreras articuladas como “Sausalito Organizado” durante las ultimas movilizaciones. A pesar de la centralización del trabajo en Casa Central, actividades de toda índole fueron sostenidas por un considerable número de estudiantes en dicho lugar. Es así como, desde una iniciativa de compañeros de psicología abierta a toda la comunidad, fueron surgiendo propuestas de intervención pública, tanto en espacios correspondientes a las dependencias de la universidad como zonas urbanas, todo esto con la intención de generar una apropiación política de los espacios cotidianamente habitados.

Días antes de iniciada la toma de la facultad, grupos de estudiantes dieron libertad a su imaginación apropiándose de parte de unos de los muros de entrada, plasmando el diseño de una guarda, actividad que mantuvo pinceles bailando por más de una semana.

No obstante, tras definida la votación del ultimo consejo de presidentes y “liberados” gran parte de los edificios, el lunes por la noche un “efectivo” compuesto por tres autoridades universitarias - entre ellos el sr. David Letelier - acudieron a la facultad de Filosofía y Educación con la intención de desalojar rápidamente a un grupo de estudiantes que en dicho lugar planificaba una reunión de asamblea. Junto a la tradicional “inspección de daños”, se extendió una orden de remover las intervenciones realizadas, entre las cuales estaba incluida el mural, sin mencionar la descriteriada orden de mantener a parte de los funcionarios trabajando durante toda la madrugada.

Llegado el día siguiente, gran sorpresa se llevaron nuestros compañeros de Sausalito cuando presenciaron uno de los actos de censura mas inesperados por las autoridades de nuestra universidad: paredes blancas, paisaje oscuro. Como ya lo hemos atestiguado, nuevamente algunas autoridades de nuestra universidad hacen oídos sordos a nuestras demandas, con el mismo descaro con que, tras un acuerdo verbal establecido la noche del Lunes a fin de evitar la censura del trabajo, hacen falta a su palabra.

Afortunadamente para nuestro querido mural los ahorros de nuestra universidad fueron puestos en las pinturas utilizadas para censurar el trabajo, la cual fue - aunque dificultosamente - removida por un grupo de estudiantes el día martes por la mañana. Actualmente el mural sigue en pie, aunque en peores condiciones.

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